“Mi hijo sufre de esquizofrenia paranoide desde hace diez años y lleva tratamiento monitoreado todo el tiempo. Es la primera vez que se pone de esa manera”. Así lo aseguró Guillermo Ramón Pumarol, mejor conocido como Willy, padre de Jean Andrés Pumarol, el joven que el pasado miércoles mató a una mujer de 70 años e hirió otras cinco personas en un residencial del Ensanche Naco.
Ante esa situación, sobre la cual el presidente Luis Abinader se refirió que es un caso complejo, y además señaló a las familias como las responsables de darle el seguimiento a ese tipo de personas que padecen dicho trastorno, el periódico Hoy detalla las características de la esquizofrenia paranoide.
¿Qué es la esquizofrenia paranoide?
La esquizofrenia paranoide ya no es un subtipo específico de esquizofrenia. Anteriormente, se caracterizaba por delirios y alucinaciones, especialmente auditivas, con un lenguaje y comportamiento generalmente organizados. Sin embargo, el DSM-5 (una guía esencial para la práctica clínica en salud mental, utilizada para diagnosticar, tratar e investigar trastornos mentales), ha eliminado los subtipos de esquizofrenia, enfocándose en la gravedad de los síntomas en lugar de categorías rígidas.
La paranoia, aunque sigue siendo un síntoma importante en algunos casos de esquizofrenia, se considera un síntoma más dentro del espectro de la enfermedad, no un subtipo distinto.
Los criterios para el diagnóstico de esquizofrenia en el DSM-5: para diagnosticar esquizofrenia, el DSM-5 requiere la presencia de dos o más de los siguientes síntomas durante al menos un mes, con al menos uno de ellos siendo delirios, alucinaciones o habla desorganizada:
Delirios: Creencias falsas que persisten a pesar de la evidencia. Alucinaciones: Percepciones sensoriales sin estímulos externos, como oír voces. Habla desorganizada: Dificultad para organizar pensamientos y expresarlos de manera coherente. Comportamiento extremadamente desorganizado o catatónico: Conductas anormales que dificultan las actividades diarias. Síntomas negativos: Disminución de la expresión emocional, falta de motivación o dificultad para hablar.
Además, el funcionamiento en áreas importantes como el trabajo, las relaciones o el cuidado personal debe estar significativamente deteriorado por los síntomas. También, algunos signos del trastorno deben persistir durante al menos seis meses.
Sobre Pumarol
Un tribunal impuso tres meses de prisión preventiva, como medida de coerción contra Pumarol, quien deberá cumplir la medida en el Centro de Corrección y Rehabilitación Anamuya, de Higüey, en la provincia La Altagracia.
De acuerdo con la solicitud presentada por el Ministerio Público, representado por la fiscal Vidalis Mora, el imputado irrumpió en varias viviendas del residencial Naco Dorado IV, agrediendo a diferentes residentes, incluyendo a la fallecida.
El imputado atacó e hirió, además, a Gricelda Ozuna Torres, Francisco Texano, Teresa Fabián de Heredia, Victoria Heredia y Guillermo Ramón Pumarol Castellanos.
El juez Rigoberto Sena, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional, impuso la medida de coerción.