La aerolínea estadounidense Southwest Airlines confirmó que la entrada en vigencia de su nueva política que obliga a los pasajeros de talla grande a reservar dos asientos al momento de comprar su boleto, entrará en vigor desde el 27 de enero de 2026. De acuerdo con información con la compañía, quienes no se ajusten a las nuevas pautas de espacio deberán pagar un segundo asiento o enfrentar potenciales cambios de vuelo en el aeropuerto si el avión está lleno.
Southwest Airlines, con sede en Dallas y reconocida en la industria aérea por su trato hacia pasajeros de cuerpo grande, anunció que la medida pretende garantizar “comodidad, seguridad y consistencia” en todos sus vuelos. Según Newsweek, la aerolínea abandonará así su histórica política de “Cliente de gran tamaño”, que permitía adquirir un asiento adicional y luego solicitar el reembolso tras el viaje.
Bajo la nueva normativa, “cualquier pasajero que no pueda acomodarse cómodamente entre los apoyabrazos de un solo asiento recibirá reembolso del segundo asiento únicamente si el vuelo no se encuentra totalmente vendido, ambos asientos pertenezcan a la misma clase tarifaria, y la solicitud de devolución ocurra dentro de los 90 días posteriores a la travesía”, publicó la aerolínea.

Otras medidas de la aerolína
El anuncio de Southwest Airlines coincide con otras transformaciones relevantes en la compañía. La misma fecha marcará el fin del modelo de “asientos abiertos”, pues la asignación de lugares pasará a ser predeterminada por la aerolínea. Este cambio, junto al cobro de equipaje que comenzó en mayo de 2025 y cargos extra por asientos con mayor espacio para las piernas, apunta a renovar la estrategia de ingresos corporativos.
Southwest Airlines enfatizó en su comunicación oficial que “los clientes que invadan el asiento adyacente deben adquirir previamente la cantidad necesaria de asientos para asegurar su disponibilidad”, una política que se trasladará a todos los canales de venta para informar a quienes utilizaron este beneficio anteriormente.
“El apoyabrazos será considerado el límite definitivo entre butacas”, especificó la aerolínea, aunque no se detallaron criterios exactos sobre cuánto debe sobresalir una persona antes de verse obligada a pagar el asiento extra. En caso de que un pasajero llegue sin haber reservado el segundo espacio y no haya asientos disponibles, la empresa gestionará su reubicación en otro vuelo, afirmó Fox 2 Detroit.

Southwest Airlines se suma así a otras grandes compañías estadounidenses como American Airlines, United Airlines, Spirit Airlines y Frontier Airlines, todas con normativas similares que exigen adquirir un asiento adicional si el pasajero no cumple con los límites del espacio estándar.
El comunicado de la aerolínea apunta a una modernización operativa: “estamos actualizando muchas políticas en preparación para la asignación de asientos”, precisó la compañía. De ahora en adelante, las personas “que hayan utilizado la política de asiento adicional deben adquirirlo en el proceso de reserva para garantizar su disponibilidad”, recalcó la empresa.
La modificación también se inserta en una oleada de nuevas tarifas y servicios diferenciados tras la eliminación del característico “Bags Fly Free” (equipaje sin cargo) de Southwest a mediados de 2025. La empresa ya anunció también que cobrará extra por lugares con espacio adicional o servicios especiales a partir de esta reestructuración.






































































